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4 septiembre, 2018 in-pacient.es

Se han publicado los resultados de lo que podemos considerar primer estudio que investiga la relación entre la fatiga y la capacidad física en pacientes con Artritis Reumatoide.

La Artritis Reumatoide es una enfermedad inflamatoria crónica que provoca una limitación en la actividad física. Con el tratamiento médico actual, el impacto de la enfermedad parece menor. Sin embargo, aspectos como la fatiga y el dolor perjudican a la calidad de vida de estos pacientes a pesar de una baja actividad de la enfermedad.

La fatiga es uno de los problemas más importantes en personas con enfermedades reumáticas y, a menudo, tienen un efecto perjudicial sobre la calidad de vida. Además, el dolor y la fatiga a menudo interfieren entre sí. Por lo que el dolor también puede explicar, en cierta medida, los informes contradictorios entre el nivel de fatiga y el grado de la actividad de la Artritis Reumatoide.

Por otro lado, la actividad física, incluido el ejercicio estructurado y planificado, es una intervención no farmacológica importante ya que afecta positivamente tanto a la fatiga en la Artritis Reumatoide como a la actividad de la enfermedad. Mejorar la capacidad aeróbica (capacidad del organismo para funcionar eficientemente al realizar actividades físicas de corta duración y de alta intensidad), la fuerza muscular, el dolor y la limitación en la realización de actividades, se relacionan con una mejora en la calidad de vida relacionada con la salud.

El objetivo de un estudio de reciente publicación fue explorar cómo contribuye la capacidad física de los pacientes con Artritis Reumatoide sobre los niveles de fatiga en estos pacientes.

Se evaluaron a más de 250 pacientes diagnosticados de Artritis Reumatoide y que aceptaron participar en un programa de apoyo, de dos años de duración, para mejorar su salud. Un 35%  de los participantes presentaron fatiga severa.

Los resultados de este estudio confirman hallazgos previos que demuestran que la percepción de la salud por parte del paciente y el dolor son factores importantes sobre los niveles de fatiga autoinformados por los pacientes. Sin embargo, la capacidad física no contribuye a la explicación de la fatiga severa.

La relación entre actividad física, fatiga y actividad de la Artritis Reumatoide es compleja. Factores como el sueño y el dolor contribuyen directa o indirectamente sobre la fatiga.

Los altos niveles de fatiga reducen la participación en la actividad física, mientras que la actividad física tiene el potencial de reducir la fatiga. Del mismo modo, no existe evidencia de que la actividad física aumente la actividad de la Artritis Reumatoide, más bien ésta puede reducirse después del ejercicio. Sin embargo, la gravedad de la enfermedad con afectación articular generalizada podría limitar la actividad física.

Por último, los trastornos del estado de ánimo como la ansiedad y la depresión presentaron un efecto tanto directo como indirecto sobre la fatiga en personas con Artritis Reumatoide. Dado que la actividad física o ejercicio es importante en el tratamiento no farmacológico de la depresión, estos resultados refuerzan la incorporación de Actividad Física como parte del tratamiento de la depresión y la fatiga en la Artritis Reumatoide.

En conclusión, los resultados de este estudio nos indican que la fatiga severa de la Artritis Reumatoide se asocia más con la percepción de salud por parte del paciente, del dolor y de los trastornos del estado de ánimo (ansiedad/depresión) que con la capacidad física. La actividad física regular debe formar parte del tratamiento de la Artritis Reumatoide.

 

 

Demmelmaier I et al. Associations between fatigue and physical capacity in people moderately affected by rheumatoid arthritis. Rheumatol Int. 2018 Aug 29. doi: 10.1007/s00296-018-4140-z. [Epub ahead of print]

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