¿Qué importancia tiene el control de peso para un asmático?
La obesidad se asocia con un Asma más severo. Síntomas más severos de Asma comporta tomar más medicación y tener mayores limitaciones en sus actividades diarias y por tanto, peor calidad de vida.
Si una persona asmática tiene un IMC superior a 30 kg/m2 (clasificado como obesidad) tiene que bajar de peso controlando su alimentación y su estilo de vida para incrementar el consumo de calorías. El exceso de peso responde a un disbalance entre lo que comemos y lo que gastamos. Mejorar la alimentación e incrementar el ejercicio físico son recomendaciones generales útiles para el control de un peso saludable.
Las personas con Asma no necesitan ninguna dieta especial. Una dieta equilibrada y variada que incluya cereales, vegetales y frutas, carne blanca, pescado y lácteos asegurará incorporar todos los nutrientes básicos a tu dieta.