
Un estudio de reciente publicación describe el proceso de desarrollo de la resilencia entre los pacientes con Artritis Reumatoide (AR). La resilencia es la capacidad de recuperarse o adaptarse con éxito a situaciones estresantes, un recurso muy valioso para pacientes que viven con una enfermedad crónica.
Se realizaron entrevistas a pacientes adultos de Artritis Reumatoide de los Estados Unidos, en las que se les pidió que expusieran sus experiencias con el diagnóstico, el vivir día a día con la enfermedad, cómo hacen frente a los diferentes retos o desafíos, el tratamiento y la relación con los profesionales sanitarios.
Se analizaron las entrevistas para describir las diferentes etapas de desarrollo de la resilencia e identificar las estrategias de los pacientes para desarrollar y mantenerla.
Los pacientes utilizaron 10 estrategias para cultivar la resilencia:
- Perseverancia: se esforzaron para no permitir que la Artritis Reumatide interfiriera en su trabajo, en las tareas diarias, en las actividades sociales o en el ocio, continuando con estas actividades mientras soportaban dolor, fatiga y dificultades de movimiento. La perseverancia ofrece a los pacientes una fortaleza mental que ayuda a enfrentarse a nuevos retos que puedan surgir en el curso de la enfermedad.
- Apoyo social: ayuda a cultivar la resilencia ya que mejora el acceso a la asistencia con actividades y el bienestar psicológico.
- Realizar actividades de valor: la emoción, el orgullo y la satisfacción de perseguir con éxito una actividad fueron motivadores y generaron un ciclo de compromiso positivo. Mejora el bienestar psicológico de los pacientes al permitir que trabajen hacia unos objetivos y desarrollen un sentido de logro cada vez que consiguen realizar una actividad.
- Flexibilidad: lograr la habilidad de encontrar nuevas formas de hacer las cosas ayuda a los pacientes a mantener su estilo de vida a pesar de ver reducida su movilidad y sus niveles de energía.
- Estrategia para regular las emociones: los pacientes utilizaron estrategias para regular las emociones y moldear los pensamientos y seConocer lantimientos sobre las situaciones desafiantes.
- Replanteamieno positivo: una estrategia para ver y encontrar la parte positiva de las experiencias difíciles permite enfrentarse a nuevos desafíos con mayor confianza en uno mismo.
- Aceptación: es el acto de reconocer la realidad de lo que supone vivir con Artritis Reumatoide. Realizar un planteamiento positivo de las dificultades y liberarse de las emociones negativas relacionadas con la enfermedad ayuda a centrarse en aspectos prácticos de cómo manejar su vida con AR.
- Humor: es otro enfoque relacionado con la aceptación que ayuda a lidiar con las emociones negativas que se experimentan durante las situaciones estresantes y mejora la capacidad para responder positivamente a desafíos futuros. El humor también ayudó a los pacientes a ganarse la admiración de los demás, en lugar de convertirse en el objeto de la compasión y condescendencia de los demás.
- Evitar pensamientos amenazantes/negativos: los sentimientos negativos sobre los efectos de la AR, los medicamentos y la discapacidad pueden ser abrumadores para los pacientes, causando angustia emocional.
- Ecuanimidad o equilibrio:mantener la calma en situaciones estresantes promovió la aceptación de los retos y el mantenimiento de la perspectiva positiva y permitió a los pacientes reservar su energía para resolver problemas.
- Mantener el sentido del control: sentir que se tiene el control de su salud fue extremadamente importante para la sensación de bienestar de los pacientes. Los pacientes adoptaron acciones o pensamientos para promover un sentido de control sobre su AR.
Según nuestro conocimiento, este es el primer estudio que analiza en profundidad este tema desde la narrativa y el punto de vista de los pacientes.
Los investigadores de este estudio concluyen que los pacientes con Artritis Reumatoide adquieren resilencia en un proceso dinámico de aprendizaje en respuesta a los nuevos retos que van apareciendo a lo largo del curso de su enfermedad. Utilizan estrategias que incluyen el manejo de su comportamiento y sus emociones que les ayuda a cultivar la resilencia.
Conocer estas estrategias puede beneficiar a los pacientes, a los médicos y a los investigadores ya que pueden desarrollarse intervenciones y programas de apoyo social en el contexto de la Artritis Reumatoide y otras enfermedades crónicas.